Ven. Relájate. No pienses en nada, o piensa lo que quieras; pero no hagas nada. Pierde el tiempo. Regálate cinco minutos o veinte, los que te hagan falta. Olvídate de tus preocupaciones: cuando estés listo (o aburrido), continúa con tu vida.
Muy a menudo no nos damos cuenta de lo importante que es reflexionar en estos tiempos. Pasamos los ratos muertos en frente del ordenador o la televisión. Pero a veces es conveniente desconectar, apagarlo todo (incluso la luz) y estar unos minutos en silencio, en armonía.
Estos peces me han recordado a un jardín Zen, uno virtual. Así que es hora de pararse a pensar…
ACTUALIZACIÓN: Por petición popular, voy a incluir un gadget de los peces para que podáis jugar con ellos cuando queráis. ¡Recuerda darles de comer!
Raúl
Ya hablamos...
2 comentarios:
si no les das de comer se mueren? conmigo van a acabar hipergordos
eso no lo sabia yoooo!!!!!!!! jajaja me encantaaa!
Publicar un comentario